Él no era realista...

"Él no era realista, y yo tampoco, y ambos sabíamos que los demás, con toda su vulgaridad, no eran más que realistas, estúpidos como las marionetas que se agarran por el cuello miles de veces y sin embargo no descubren nunca el hilo que las mueve."

Opiniones de un payaso, Heinrich Böll, 1963.
"(...)Le confieso a usted que algunas veces me canso de este oficio, considerando que, las más de las veces, se reduce a hacer la guerra a los ignorantes o a los desesperados. Por fortuna, el nuevo rumbo que ha tomado la policía es muy distinto. Nosotros negamos la afirmación de los snobs ingleses según la cual los iletrados son los criminales más peligrosos. Afirmamos que el criminal peligroso es el criminal culto; que, hoy por hoy, el más peligroso de los criminales es el filósofo moderno que ha roto con todas las leyes. En comparación con él, los ladrones y los bígamos casi resultan de una perfecta moralidad, y mi corazón está con ellos. Por lo menos, aceptan el ideal humano fundamental, si bien lo procuran por caminos equivocados. Los ladrones creen en la propiedad, y si procuran apropíarsela solo es por el excesivo amor que les inspira. Pero al filósofo, la idea misma de propiedad le disgusta, y quisiera destruir la idea misma de posesión personal. Los bígamos creen en el matrimonio; de otro modo, no se someterían a la formalidad solemne y ritual de la bigamia. Pero el filósofo desprecia el matrimonio. Los asesinos respetan la vida humana, solo que desean alcanzar una plenitud de vida propia, a expensas de las vidas que consideran inferiores a la suya. Pero el filósofo odia la vida, ya en si mismo o en sus semejantes."

El Hombre que fué Jueves
, Gilber Keith Chesterton (1908)

"Tiene que haber algo en los libros, cosas que no podemos imaginar para hacer que una mujer permanezca en una casa que arde. Ahí tiene que haber algo. Uno no se sacrifica por nada"


Ray Bradbury, Farenheit 451 (1953)
"Si no entienden que les llevamos una felicidad matemáticamente infalible, deberemos obligarles a ser felices"

Anotación Nº1, D-503.
En "Nosotros", de Yevgeny Zamyatim (1921)
"A aquellos dos habitantes del paraíso se les planteó la alternativa siguiente: O la felicidad sin libertad o la libertad sin felicidad. Y aquellos mentecatos eligieron la libertad, como era de esperar. Naturalmente, durante siglos añoraron las cadenas. A esto se resume toda la miseria de la humanidad"

Anotación Nº11, D-503.
En "Nosotros", de Yevgeny Zamyatin (1921)

Cuentan que en Broadway hay una luz rota por cada corazón...

Cuentan que la vida es un juego y que luego te quitan el tablero...

Te ofrecen máscaras y disfraces y un esbozo de la historia, y luego te dejan improvisar su Cabaret del Vicio...

En ciudades que ya no son bellas y te roban, hay impresos, garantías, notitas y una bota militar en la escalera...
Hay sexo, muerte, cochambre en blanco y negro por un chavo. Y aunque los trenes pasan a su hora, no van a ninguna parte...

Se enfrentan a sus responsabilidades aunque sea de rodillas. Hay mujeres que pasan frío y prefieren no mirar atrás. Y las viudas que se niegan a llorar se vestirán con una liga y un lazo, y aprenderán a levantar sus piernas en este Cabaret del Vicio.

¡Al fin el Show de 2008! ¡El Ballet en el escenario en llamas! El documental visto en la pantalla quebrada...¡El horrible poema esbozado sobre una hoja arrugada! Hay un policía de alma honrada que lo ha leido y su cabeza está en otra parte y gruñe y llena su jarrón de rosas con un sentimiento de inquietud. Despues busca en la espina que queda una huella o una mancha carmesí, y se esfuerza por ignorar las cadenas que les sujetan los pies. Mientras, su señor, en la oscuridad cercana, se mira con un ojo brutal las manos que nunca desnudaron a una amante pero que han oprimido a una nación... Y en sus sueños íntimos anhela el áspero abrazo de crueles máquinas. Pero su amante no es la que parece y, sin dejar una nota, se irá...

¡Al fin el show de 2008! ¡La tragedia de situación! ¡Gran ópera y culebrón! ¡Escaladores de la desesperación!

El color del agua en la galería inundada...

Hay una chica que empujará sin fuerza, desesperada. Cree que la mano bajo el guante es tal vez la que necesita tomar y, aunque duda de la moralidad de su anfitrión, está más tranquila en la "Tierra del haz lo que quieras" que afuera, donde hace frio. Pero el telón y las butacas dan pie y el silencio es devorado por la representación...

Hay un asesino en la Matineé, hay nombres escritos en el pasillo, y ni los jefes ni los actores saben si el espectáculo ha acabado o no. Y, mirando de soslayo, guardan cola...Pero la máscara helada solo sonríe...

¡Al fin el show de 2008! ¡El himno que nadie canta jamás! ¡El coro del toque de queda! ¡La Comedia Divina! ¡Los ojos saltones de marionetas ahogadas por sus cuerdas!

¡Hay emoción y escalofrio, muchas chicas, canciones y sorpresas!

¡En este lugar hay algo para todos, reserve hoy su asiento!

Hay perjurio y maldades...
...pero no hay maricas...
...ni judios...
Bienvenidos a este Carnaval de bastardos...

...EL CABARET DEL VICIO...
Hoy empezaremos a andar y a ver mundo,
y a observar como la gente anda por ahí y habla,
el verdadero aspecto que tiene.
Y aunque nada de ello sea yo cuando entren,
al cabo de un tiempo
todo se reunirá en mi interior.
Guy Montag, en Farenheit 451
Ray Bradbury, 1953.